La Revolución de la Televisión Conectada en América Latina
La inversión publicitaria en la Televisión Conectada (CTV) superará los 550 millones de dólares en América Latina, reflejando así, el potencial de este mercado y demostrando cuánto hemos avanzado en comparación con años anteriores.
La Televisión Conectada (CTV) ha mostrado un crecimiento enorme en América Latina. Esta meta refleja un cambio significativo en los hábitos de consumo de medios, impulsado en parte por la pandemia y la creciente disponibilidad de infraestructura de conectividad y dispositivos accesibles.
El desarrollo de la infraestructura de banda ancha y la accesibilidad de dispositivos como smart TVs han sido cruciales para este crecimiento. Además, la oferta de servicios de streaming, tanto pagos como gratuitos, ha hecho más fácil para las audiencias acceder a contenidos variados y de alta calidad. Eventos globales como el Mundial de Fútbol 2022 también jugaron un papel importante en atraer a más usuarios a estos servicios.
Las audiencias en América Latina han evolucionado, adoptando la CTV como un medio preferido para consumir contenidos. Este cambio es particularmente evidente en las generaciones más jóvenes, como la Generación Z, que prefieren consumir contenido a demanda y en dispositivos conectados a internet. La tendencia a “maratonear” series en CTV es un ejemplo claro de cómo estos hábitos están moldeando el mercado.
Los anunciantes han reconocido esta tendencia y están invirtiendo cada vez más en publicidad en CTV. Grandes sectores como el retail, bienes de consumo empaquetados, automotriz y finanzas están liderando esta inversión, utilizando datos para dirigir sus campañas de manera más efectiva y alcanzar a su audiencia objetivo con mayor precisión. La democratización de la publicidad en CTV ha permitido que tanto grandes como pequeños anunciantes puedan aprovechar este medio, aunque las empresas más pequeñas aún están en proceso de adaptación.
A nivel tecnológico, la CTV ofrece ventajas significativas sobre la televisión tradicional, como la capacidad de segmentación y la transparencia en el análisis del rendimiento de las campañas.
Las empresas con presencia internacional han avanzado en el desarrollo de infraestructuras tecnológicas y estrategias basadas en datos, anticipándose a un futuro sin cookies y fortaleciendo sus datos propios para una comunicación más precisa con sus consumidores.