La presión de la guerra de aranceles en la publicidad digital

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La presión de la guerra de aranceles en la publicidad digital

Fuente original: WARC

Las dos economías más grandes del mundo siguen en una guerra de tarifas que no pareciera llegar a su fin. Pero, aunque sería simple pensar que esto solo está afectando a los minoristas chinos, la realidad es que también está teniendo un impacto directo en las compañías de tecnología en Estados Unidos, al depender de la inversión de los primeros.

Uno de los mayores ejemplos de esta situación es el caso de Temu, el mercado en línea propiedad de la empresa china PDD Holdings, quien al limitar su inversión publicitaria en Estados Unidos, ha caído en su posicionamiento dentro del ranking de apps descargadas para iOS. Esto nos revela lo mucho que la empresa depende de la publicidad, más allá de búsquedas orgánicas, para mantenerse vigente en descargas.

Pero esta situación también ha tenido un impacto directo en el ingreso de Meta y Google. Según el New York Times, Temu colocó 1,4 millones de anuncios en los servicios de Google en 2024 y fue uno de los principales anunciantes minoristas en EE.UU. en 2023, invirtiendo cerca de £2 mil millones en Meta (WARC, 2024). Sin embargo, efectivamente retiró sus anuncios de compras de Google en Estados Unidos, alcanzando cero impresiones el 12 de abril vs. el 20% el 31 de marzo (Adweek).

Todo esto refleja una interdependencia entre las industrias. Ya que no hay país más grande en ecommerce que China, con uno de sus mayores mercados de exportación y demanda siendo Estados Unidos. Incluso, un analista senior del NYT declaró que el año pasado las startups chinas abrieron la “manguera de dinero dirigida a la publicidad”, pero esta se está cerrándose; y, al eliminar a China de la ecuación el panorama del comercio electrónico cambia de una forma inesperada.

Como respuesta, las marcas chinas han estado impulsando sus ventas dentro de su país. Lo que es un comportamiento similar al de Canadá, quien está promoviendo entre sus consumidores comprar marcas nacionales. Mientras que en Estados Unidos se espera ver a nuevas empresas tratar de ocupar el vacío que dejó China, pero por el momento la mayoría están siendo cautelosas y esperando a entender qué sucederá.