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El poder del contenido educativo
¿Usted sabía que por cada segundo que pasa se realizan 75,259 búsquedas en Google alrededor del mundo? Esto quiere decir que en el tiempo que le tomó leer esta pregunta, ya se han generado más de 350mil búsquedas, además de que se han publicado 42mil tweets y reproducido 400mil videos en YouTube (puede visualizarlo con mayor detalle aquí).
La sobreexposición a tanto contenido y estímulos visuales ha provocado que los usuarios se sientan “sobrecargados”, logrando poner atención únicamente a las fuentes que consideran de valor, mientras bloquean el resto.
A su vez, el acceso a tanto conocimiento ha resultado en consumidores más informados y conscientes a la hora de comprar, que no se conforman con adquirir cualquier marca o producto, sino que buscan tomar la mejor decisión posible. Para ello, investigan en línea y visitan distintas tiendas físicas, comparando precios, beneficios y riesgos.
Debido a lo anterior, para poder llamar la atención de los consumidores y sobresalir en este ecosistema tan saturado, los publicistas deben generar contenido atractivo y de interés para su publico meta; y la mejor manera de lograrlo es a través del material educativo.
El contenido educativo
Los límites del conocimiento y el acceso a la información se han ampliado a tal punto que el aprendizaje se ha vuelto un proceso de todos los días, además de una expectativa y deseo por parte de las personas. De hecho, 52% de los consumidores globales dicen que quisieran estar más informados y 75% buscan en internet, como primer paso, cuando nos saben cómo hacer algo.
Por eso, en los momentos en que aparece un problema, todos nos sentimos aliviados al encontrar rápidamente una solución proveniente de un experto en el área, que acompaña, guía y da respuesta a nuestras dudas.
Este experto puede ser una marca, que se posiciona como un educador sobre ciertos temas, lo que le permite conectar a un nivel más personal con sus clientes y ofrecerles un valor agregado, mientras construyen una relación de confianza.
El rango de acción para las marcas dentro del espectro de la educación es bastante amplio, puede incluir tutoriales, videos (en YouTube se reproducen 500M de videos con contenido educacional a diario), materiales que expliquen cómo hacer algo, artículos de opinión, reseñas sobre los productos, entre otros. La clave está en proveer información que sea valiosa para los consumidores, funcional, atractiva, entretenida, y que resulte en un crecimiento orgánico de la audiencia.
Una cucharada llena de azúcar permite que la medicina baje
La famosa frase de Mary Poppins “una cucharada de azúcar permite que la medicina baje” resume el sentido que tiene el crear contenido educativo para las marcas. Los consumidores están dispuestos a comprar, ser leales y recomendar una marca, a cambio de que ésta les ofrezca conocimiento que simplifique su toma de decisión y/o soluciones sus problemas.
Pero el contenido educativo también cumple otro propósito: el diferenciar y expandir el valor de un producto, al reflejar sus beneficios, utilidad y el rol que juega en la vida del consumidor.
Algunas marcas que han logrado destacar a través de distintas propuestas en esta área son:
- Dyson- una compañía de tecnología que se ha enfocado en educar y acercar a jóvenes al área de la ingeniería. Para esto tienen una fundación llamada “The James Dyson Foundation” que ha entregado más de 130,000 kits y material para que estudiantes aprendan en sus colegios sobre esta profesión (las cajas se entregan de manera gratuita y permanecen por 4 semanas en cada colegio).
- Lush- al ser una compañía de productos cosméticos con una consciencia eco-amigable y ética, se aseguran de facilitar información sobre sus productos y temáticas relacionadas al cuidado del medio ambiente a través de su sitio web, RRSS y rótulos en las tiendas. Además, educan a sus colaboradores sobre estas temáticas para que sean capaces de informar a sus clientes y dejar en ellos el interés de investigar aún más sobre el tema.
- Whole Foods- es un supermercado orgánico que tiene un blog en el que comparte colecciones de recetas, consejos de salud, información sobre vendedores locales, entre otros. Y para complementar, colocan carteles dentro de sus locales con información sobre sus productos, datos importantes a considerar como consumidores, e inclusive han desarrollado un sistema en el que sus clientes pueden ir a revisar y cambiar sus cosméticos de belleza que no cumplan con los estándares de salud y calidad que determina el supermercado.
- OneLove– es una organización que generó contenido educativo sobre las relaciones sentimentales para San Valentín. Si quiere saber más de esta iniciativa revise nuestra campaña de esta semana.
Resultados del uso de contenido educativo
Un estudio de Conductor, aplicado a 500 personas, señaló que los consumidores que se exponen al contenido educativo de una marca son 131% más propensos a comprar sus productos, en comparación a quienes no vieron el material. Y a la hora de comprar, un 81% de los consumidores expuestos a la marca, la escogieron al tener que elegir entre competidores.
Esta investigación demuestra que el contenido educativo mejora el reconocimiento de las marcas y su diferenciación en un ecosistema saturado de competidores. Además, lleva a la conversión y recomendación del contenido por parte de los clientes, lo que atrae a nuevos y potenciales consumidores interesados en adquirir los servicios y productos de un negocio.
También ayuda a encontrar nuevos puntos de contacto para interactuar con un público y puede reforzar la imagen de la marca, al crear confianza y respaldar su reputación y título como autoridad sobre un tema.
¿Qué se debe tomar en cuenta a la hora de crear contenido educativo?
El contenido educativo no se limita a crear experiencias para los consumidores con la imagen de su marca, sino a proporcionarle un aliado, consejero y educador con el cual él tenga la confianza de conversar y buscar ayuda.
Por esta razón, no se trata de generar contenido por crearlo, sino de buscar la mejor fuente de inspiración, los dolores, dificultades y las actividades de la audiencia, que la hacen perder tiempo, dinero o esfuerzos. De esta manera, los consumidores van a reconocer su conocimiento e interés por ellos, y apreciarán los consejos y el material que les proporcione.
Otra opción, que es muy bien recibida, es el “curar” (o validar) fuentes o información para su audiencia, en especial en los casos donde usted no tenga tanto conocimiento sobre el tema. Esta acción le ahorra tiempo al consumidor y asegura que la información que usted le está facilitando es correcta y aporta a su búsqueda.
En todos los casos, se recomienda utilizar contenido sencillo, fácil de accesar, entretenido y atractivo. Ya que todos los consumidores tienen curvas de aprendizaje y un conocimiento previo distinto.
Fuente de referencia:
Forseight Factory. (2019). Trending 2019: Educator brands. Recuperado de: https://www.foresightfactory.co/
ANNALECT
Annalect – Unidad de consultoría en efectividad de marketing basado en Datos y analítica de OmnicomMediaGroup.