Mientras las compañías continúan compitiendo por el tiempo en pantalla, la cantidad de horas por día que los usuarios invierten consumiendo medios finalmente se ha estancado.

Según el reporte de Nielsen Q3 2018 del Total de la Audiencia, los adultos estadounidenses pasan un promedio de 10 horas y 30 minutos al día conectados a los medios, aproximadamente la misma cantidad de tiempo que un año atrás.

“Pero hay cambios en dónde se dedica el tiempo que se está invirtiendo, podemos ver, por ejemplo, un aumentado en el uso de dispositivos conectados al internet y el uso de aplicaciones y la web en los celulares inteligentes, lo que está gradualmente remplazando el tiempo invertido en otras fuentes”, dijo Peter Katsingris, SVO de insights de las audiencias, cuando presentó el informe.

“Estos cambios no son sorprendentes, prácticamente 7 de cada 10 hogares ahora tienen un dispositivo capaz de transmitir contenido, y una cantidad similar tienen acceso a un servicio de transmisión SVOD.” [SVOD en español significa “servicio de suscripción de videos bajo demanda”]

Este número ha permanecido estancado durante los últimos dos años, a pesar de que ahora los consumidores tienen más opciones de transmisión que nunca.

La visualización se da por temporadas, pero nuestro promedio de consumo solamente ha aumentado con el paso de los años. Las cifras anteriores de Nielsen muestran que, en el 2002, el adulto típico consumía 50 horas de medios por semana. Este número aumentó a 80 horas en el 2016, estimulado, en gran medida, por el uso de pantallas adicionales en el mercado, lo que incluye los teléfonos inteligentes y las tabletas.

Si usted cree que esas horas de consumo están siendo impulsadas por los Millennials, adivine otra vez.

De acuerdo con el último reporte, el grupo demográfico que más consume medios tiene entre 50 y 64 años.

Si bien el tiempo viendo televisión en vivo y con horario limitado antes dominaba el consumo diario de medios, esto disminuyó un poco del 2017 al 2018; a la vez que aumentó el consumo de videos en dispositivos conectados al televisor.

La cantidad de tiempo invertida viendo televisión en vivo y escuchando la radio disminuyó del 2017 al 2018, mientras que el uso de celulares inteligentes y consolas de videojuegos aumentó año tras año.

Cuando se preguntó a las personas qué factor más influyó qué contenido escucharon o vieron en un servicio de streaming, la publicidad ocupó el octavo lugar en la lista, tanto en el caso del streaming de video como en el de audio, según el reporte. Del grupo encuestado, solamente 34% indicó que la publicidad los llevó a contenido particular de streaming de video y de audio.

El número quedó rezagado con respecto a otras opciones, como la disponibilidad de programas de streaming que ellos solían ver o escuchar en emisoras, recomendaciones de familiares o amigos, y recomendaciones y referencias proporcionadas por sitios o aplicaciones que dan servicios de streaming.

Artículo original: Adweek, 2019