Aprovechándose de la nostalgia, Motorola lanzó al mercado la nueva versión de su modelo Razr (en el 2019): un celular que en su momento fue icónico y definió a una generación.

Este fue un reto conjunto para la marca telefónica y Los York, la agencia encargada de anunciar el retorno del celular que se dobla, manteniéndolo como un símbolo de status que carga con el ADN del modelo anterior.

Si nos devolvemos al 2004, año en que se lanzó la versión original, recordaremos que el celular estaba disponible en casi todos los colores y sobresalió en el mercado por su diseño. Además, en esta época era el celular más delgado que existía en el mercado (según CNET) y muchos lo amaban porque se colgaba al cerrar la tapa. ¡Un efecto bastante dramático!

Cuando CNET entrevistó a Sergio Buniac, CEO de Motorola, se le preguntó cómo pensaba posicionar el celular, tomando en cuenta que para algunas generaciones es un símbolo que trae nostalgia pero el producto realmente no está posicionado entre los adolescentes. A esto el ejecutivo explicó que:  “El plegable es una tecnología que está comenzando. Creemos que hay tantas opciones y vías con eso, por lo que tenemos que pensar en nuevos segmentos de consumidores a medida que avanzamos ”.

Este es un ejemplo perfecto del mercadeo de nostalgia,  porque la empresa se inspiró en el pasado para satisfacer un deseo que identifico en sus consumidores actuales y pensó como atraerlos sin importar la generación.  Como lo planteó Digital Trends, “El Motorola Razr depende mucho de su diseño y de la nostalgia para ganar fans.”